Como si se tratase de una clase de aerobicos o danza, aprender a bailar salsa y bachata implica un nivel alto de actividad física y coordinación que trae cambios positivos al organismo. Con el dominio de cada paso y vuelta, aumenta la resistencia corporal, la capacidad pulmonar, incrementa una mayor elasticidad en las articulaciones, mejora la circulación, entre otros beneficios.
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Desde los 13 años
1 hora la sesión, 2 sesiones por semana.
Av. Nicolas Ayllón 7722, Ate Vitarte, Lima - Centro Recreacional CONA